martes, 9 de agosto de 2011

La tiendita de recuerdos.....

"Para recordar", así se llama la pequeña tienda de recuerdos que queda en la esquina de la calle de las espumas, al frente del árbol más viejo del mundo y al lado de una banquita de madera donde se sienta Don Joaquin todas las tardes para ver pasar una lluvia de burbujas.

Es una tienda mágica, y está llena de millones de recuerdos de todos los habitantes del pueblito de Tornez al norte del polo y al sur de Australia, es un pueblito invisible pero muy increíble.  En "para recordar" hay cartas de amor de aquellos que ya ni se miran pero que un día se entregaron hasta el alma, hay cajas musicales con bailarinas cansadas de dar vueltas, hay anillos de brillantes y también de plástico de colores, hay almohadas de plumas q alguna vez hicieron parte de una guerra en la cama, hay copos de nieve de inviernos pasados y pedacitos de sol del último verano; hay estrellas fugaces que algún enamorado dejó por ahi y hay un cachito de luna que quiere ser encontrado.

La tiendita de recuerdos huele un poco a canela y a galletas de la abuelita, cuando entras en ella es como si te pusieras encima un suave abrigo, y Susi la linda niña que atiende no te de la mano, te da un abrazo, porque así se sienten los recuerdos, como abrazos.  Susi primero pegunta que tal está tu ánimo y cual es tu color favorito y así sabe que tipo de recuerdo estás buscando.  Si estás feliz y tu color es el amarillo seguro buscas un pedacito de sol o la cobija que te regaló tu papá el día que naciste, si estas aburrido y tu color es el azul vas por un poco de nube enlatada para poder soñar bonito.   Si estás triste y tu color es el gris seguro estas buscando una estrella fugaz que alguien te regalo una vez y que después de unas lágrimas desapareció por completo.

Susi sabe muy bien lo que cada uno busca en "para recordar", la gente  busca los recuerdos para sentirse mejor, y evita desprenderse de ellos porque asi siente que los momentos siguen vivos.  Es lindo trabajar en la tiendita de recuerdos, hay tantas cosas maravillosas, tan llenas de magia, de risas, de lágrimas, de abrazos, de olores dulces y refrescantes, hay tanto amor en ese lugar que Susi nunca está triste, ella siempre está acompañada de los buenos momentos de alguien más, de los buenos recuerdos.

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