En una misma semana vi a una libélula de 5 colores y a un colibrí verde tornasol, dicen que es de buena suerte encontrarse estos dos seres alados, pero según yo la suerte no ha estado de mi lado últimamente.
Mi muela estaba adolorida, de repente me dió tos de soledad, mis dedos me dolían al escribir palabras dulces y mis ojos estaban volviéndose un poco rasgados después de tanto recordar imágenes tristes.
Creer en la fantasía cuando se esta triste aveces resulta difícil, imaginar que mañana será mejor cuesta un poco de trabajo y volver a creer es casi un reto. ¿Qué se hace cuándo te parten el corazón y el rompecabezas aún no puede completarse? ¿Qué pasa con el alma cuando sientes que se escapó volando y te dejó vacía? ¿Cómo haces para volver a ilusionarte?
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